Saben, nunca he sido de esas personas que le gusta mucho la convivencia con grandes grupos de niños, pues, al cabo de un rato, generalmente termino un poco frustrado, sin embargo, durante las exposiciones realizadas en la Semana de las Ciencia y Tecnología en el malecón, estos sentimientos se vieron opacados por una serie de sonrisas y miradas de asombro
por parte del público
Como bien había mencionado en una entrada anterior, la exposición que realice con mi equipo fue acerca de cómo identificar los alimentos chatarra por medio de almidón, para de ese modo, crear algo de conciencia en las futuras generaciones acerca del consumo de alimentos que pueden ser dañinos para la salud si se consumen en exceso
A decir verdad, fue una experiencia bastante grata, se atendió a un público de diferentes edades, desde aquellos infantes que inician su nivel básico, hasta aquellos que se encuentran en los últimos semestres del nivel medio superior. Obviamente, a cada uno de ellos se les dio un trato distinto, procurando siempre mantener un nivel de lenguaje adecuado.
Realmente fue una experiencia bastante buena, que para ser sincero, en un principio asimilaba que sería un tanto monótona, estaba equivocado.